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Todos inclinados ante el nuevo emperador

Desde luego… Tanto antiamericanismo de boquilla, tanto antiimperialismo y tanta leche para andar hoy perdiendo el culo por no perderse la foto del nuevo emperador subiendo al trono.

110 años después de que los gringos robaran los restos de nuestro imperio para iniciar el suyo; tras más de un siglo de tradicional antipatía española para los nuevos amos del mundo, rota en parte por el proyecto franquista de hermanarnos con aquél gran país cuyo origen se basa en miles de criminales europeos huidos al otro lado del Atlántico para exterminar a los que allí encontraron y establecer «la tierra de la libertad», resulta que los últimos antigringos que quedaban andan hoy rezumando aceite. Resulta que no hay nada más de lo que informar, no hay platós de radio ni televisión fuera de Washington…

– Oiga, es que es negro.

– Ah, que ahora además somos racistas y preferimos a uno u otro en función de su color… ¿Acaso no debemos defender a las personas sin importarnos su color? ¿Acaso no es un blanco igual de bueno o de malo que un negro? ¿Es que al revés no es lo mismo?

– Pero es que además es del partido demócrata, el partido de la paz…

– ¿Se refiere usted al partido del presidente que lanzó las bombas atómicas que masacraron a cientos de miles de civiles o del que inició la guerra de Vietnam durante la que se dedicaron a abrasar poblados enteros con Napalm? Tal vez al partido del presidente que bombardeó Irak para que así nadie mirara qué (ni a quién) escondía bajo la mesa…

– Es que usted no lo entiende… hoy es un día muy importante.

– ¿Ah, sí? Pues mire, según mi hoja de cálculo hoy es «20/ENE». Si al final vais a ser todos unos fachas…

Desde luego, si no fuera por los árbitros del Bernabeu y por la coronación de B.Obama, no habría periódicos. Esto es lo que hay. Como no hay nada más que contar y todo marcha tan bien…

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