Me remito a lo dicho por Orisson en su entrada.
Sólo añadir lo que le comentaba a Pcbcarp en la entrada anterior (aquí): Es cierto que la deriva de las asambleas, aprobando según qué propuestas puede desnaturalizar el impulso inicial que llevó a gentes de toda idea, creencia y condición a secundar o al menos simpatizar con el movimiento. Bien, pues no nos quedemos dando nuestra opinión a nuestros amigos cercanos. Soltémosla en la red, y también allí mismo, en los turnos públicos de palabra.
12 Comments
Gracias, Gonzalo. Aúpa y a currar, que hay mucho que hacer.
Un saludo
Hola, amigo Gonzalo
Pues sé por tí que el movimiento 15-m en Sevilla es el que debió de ser en la puerta del Sol de Madrid.
Yo estuve allí (en Madrid) el sábado y, aparte de perroflautas, campeones nacionales de diábolo y aspirantes a «actores de la calle» tipo Achero Mañas («Noviembre»).
Sinceramente, no puedo apoyar este movimiento con tal falta de criterio y de fines concretos. Y huyo como de la caca de todo lo que me huele mínimamente a izquierda.
Saludos salvajes.
Hola Gonzalo: Me alegro mucho de coincidir de nuevo por estos mundos cibernéticos.
El movimiento este me parecia muy ilusionante, en especial por lo que tiene de sociedad civil en movimiento sin necesidad de políticos que guíen el «rebaño».
Pero se está yendo al carajo por una razón muy sencilla: con los radicales de izquierda no se puede ir ni a cobrar una herencia. Están «tan en posesión» de la verdad absoluta, que son incapaces de llegar a acuerdos a no ser que a todo se les diga «si señor».
Ya han empezado con propuestas delirantes del tipo «todo el poder para los Soviets», o preocupantes en plan «aborto libre y gratuíto», «enseñanza pública y laica», etc.
He visto un reportaje de vídeo de lo de Sol que me ha parecido repugnante, sectario y totalitario.
Me alegro de lo que has visto tú en Sevilla, de cuya veracidad, además, si lo cuentas tú, no dudo.
Pero en fin, que fue muy bonito y pudo serlo mucho más. Pero se lo han cargado.
Yo no es que sea especialmente de derechas, pero tengo claro para siempre que no se puede ir ni a la esquina con gente cuya cultura política se resume en un par de elepés de La Polla Records, mal digeridos y tomados sin sentido del humor.
Se lo han cargado y, de hecho, ya no es noticia (ni para bien ni para mal) en la mayoría de periódicos. El momento ha pasado.
Un abrazo, por cierto, que no sé a qué botón le he dado y me iba «a la francesa».
Nos seguimos viendo por aquí.
Leñe, Rafa, cuánto tiempo, qué alegría leerte.
Mis obligaciones laborales y familiares me están impidiendo seguirlo tan de cerca como me gustaría, y por lo que se lee y ve es posible que esté tomando ese cariz. Pero tengo claro que de ser así, un gran culpable de ello será no sólo el sectarismo de los rojos sino el empujón manipulador que le ha dado el 15-M no Rubalcaba ni IU, sino la derecha mediática.
Tanto se han empeñado en gritar ¡que vienen los rojos! para movilizar el voto pepero (en un rápido vistazo esta mañana he leído a varias personas que decían aquello de «no iba a votar pero viendo ese espectáculo lo he hecho») que posiblemente hayan hecho el 15 M más atractivo -aún- para algunos perroflautas…
Ya digo que son impresiones desde la barrera. Lo siento.
Ayer, despues de una delirante función de Faemino y Cansado, me acerqué por Sol.
Mi conclusión fue, 50 tiós currando como animales, responsables, limpiando…
Y 2000, dado que no les dejan hacer botellón, poniéndose de canutos hasta arriba
Me da que esto da poco más de sí…y mira que lo siento
Ya estamos como siempre. El 15-M tiene dos versiones: El 15-M de Madrid y el 15-M de Sevilla.
O sea, como el ABC hace más o menos 70 años.
¡Qué cosas!
Y encima, los adoquines de la puerta del Sol no se despegan. Lo mismo da. Al fin y al cabo, debajo de los adoquines no está la playa sino la estación del metro.
Ya estamos como siempre. El 15-M tiene dos versiones: El 15-M de Madrid y el 15-M de Sevilla.
O sea, como el ABC hace más o menos 70 años.
¡Qué cosas!
Y encima, los adoquines de la puerta del Sol no se despegan. Lo mismo da. Al fin y al cabo, debajo de los adoquines no está la playa sino la estación del metro.
Dios mío, ayúdame…me he vuelto cínico.
Si al final es lo que yo te decía: que una cosa es la gente de Sevilla y otra lo que hubiera en Madrid o en Barcelona
Mucho mejor la de Vitoria
¡Donde vamos a ir a parar!
(Perdón, Gonzalo, no quiero crear un cisma familiar)
🙂
EL CAPITALISMO NO SE REFORMA EL CAPITALISMO SE DESTRUYE .MUERTE AL ESTADO Y A SUS PERROS VIVA LA ANARQUÍA LIBERTARIA
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