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Gilles, 30 años

Navegando por ahí he visto que hoy se cumplen 30 años. Y me ha venido a la mente la escena de aquella tarde, sentado junto a mi padre, delante de la tele, viendo desintegrarse su Ferrari y esforzándome por no llorar delante de todos. Tuve la inmensa suerte de ver en directo la que fue su última victoria, cuando ese era un deporte de hombres bravos. Y, cosas del destino, también estuve presente cuando su hijo consiguió un campeonato que a él le robó la pista.

Zolder, 8 de mayo de 1982. El día en que el 27 se volvió un número eterno.

6 Comments

  1. Kikas wrote:

    O sea, que tú eras de los que seguías esto antes de que llegase Indurain…
    😉

    martes, mayo 8, 2012 at 17:39 | Permalink
  2. Gonzalo wrote:

    Jajaja.

    Exactamente. Incluso antes de Perico.

    Concretamente, desde que los que hoy te sueltan un análisis teórico-técnico de la estrategia de paradas no supieran si un fórmula 1 tenía ruedas o velas.

    Yo ví como la F1 se iba de Jerez porque íbamos diez y el del tambor, costando las entradas la quinta parte que en Barcelona. Yo me paseaba por los boxes arrancándome los motores turbo de los 80 a dos metros de mis orejas, y ahora estos pánfilos tienen que llevar tapones a la grada porque si no, no pueden aguantar. Yo veía carreras en las que los pilotos se jugaban la vida por frenar 20 metros más allá, mientras estos sosos me hablan de lo guay que son estos frenos de carbono que permiten que el mejor y el peor puedan frenar a tres cuartas de la curva…

    Y dice el calvo que la F1 de ahora es apasionante…

    martes, mayo 8, 2012 at 23:42 | Permalink
  3. Kikas wrote:

    Eso de calvo me ha parecido despectivo…
    😉

    miércoles, mayo 9, 2012 at 13:36 | Permalink
  4. Gonzalo wrote:

    Jejeje. Tú eres un jipi comparado con el destinatario…

    miércoles, mayo 9, 2012 at 13:38 | Permalink
  5. Casi avergüenza decirlo, pero una parte de la atracción que ejerce el automovilismo está precisamente en que, a veces, se puede morir alguien. Utilizando un simil taurino, la F1 actual parece una corrida con toros embolados.

    martes, junio 5, 2012 at 23:32 | Permalink
  6. Gonzalo wrote:

    Evidentemente, en determinados deportes/espectáculos el riesgo es un componente muy importante de su atractivo. No es que al espectador le guste que el piloto se pueda esmorrar, pero sí ver qué es capaz de hacer tal piloto, por dónde es capaz de meterse jugándose el bigote, que no esté al alcance de los otros. Eso es lo que distingue a un buen piloto de un gran piloto. Y eso conlleva riesgo.

    El símil me parece apropiado.

    jueves, junio 14, 2012 at 11:20 | Permalink

One Trackback/Pingback

  1. Bitacoras.com on martes, mayo 8, 2012 at 16:21

    Información Bitacoras.com…

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